En una época, en el balcón del dúplex del pasaje Camilo Paz, era costumbre llegar al final del día para empezar un ritual largo y tendido con la guitarra hasta altas horas.
Una vez entrada la noche (alrededor de las 02 AM), miré al cielo y lucía estrellado, mientras que un silencio absoluto invadió cada rincón del barrio.
En ese momento, tuve mucho miedo porque no entendía que era un ser muy pequeño ante tanta inmensidad y, en mi cabeza, se reproducía la secuencia de una perla cayendo sobre el mar.
Eternidad es un viaje hacia adentro.
#EricAguirreCelebra el primer aniversario del disco Eternidad | 2020